Ecoescuela recalca la imperiosa necesidad de ayudar al planeta

Los gobiernos deberían invertir grandes cantidades de recursos en solucionar el desastre medioambiental que destrozará el futuro de los más pequeños, pero en la realidad, no está siendo de esta manera.

La lucha contra el cambio climático tiene muchos frentes abiertos debido a la imperiosa necesidad de ayudar al planeta. A través de sus industrias, la actividad humana ha causado efectos devastadores para el medioambiente, tras tantas décadas de contaminación constante. Por ello, es necesario realizar acciones para concienciar a la sociedad sobre la importancia de esta causa. En este sentido, Ecoescuela es un proyecto que pone énfasis en los centros escolares como punta de lanza de la lucha contra el cambio climático, brindando la oportunidad a estudiantes y docentes de plantar árboles en zonas devastadas por incendios.

¿Cuáles son los objetivos de Ecoescuela?

Ecoescuela es una empresa social que no reparte dividendos, es decir, que debe autogenerarse sus recursos económicos para poder luchar contra el cambio climático mediante la reforestación de bosques quemados. Además de la tarea ecológica, realiza una aportación social, ya que emplea a personas con discapacidad psíquica o física a las que usualmente les cuesta conseguir empleo. Por este motivo, el Proyecto Ecoescuela cobra una cuota de participación de 4 euros por los 3 años que dura el proceso.

Perder la indiferencia y ayudar al planeta

Esta iniciativa de lucha contra el cambio climático desde los centros escolares busca despertar la conciencia de los estudiantes y aunar sus esfuerzos para combatir la deforestación, ya que serán ellos los que sufrirán las consecuencias. Por consiguiente, cada uno de los participantes será parte esencial y activa de la recuperación del planeta, demostrando implicación en la cuestión y adquiriendo el valor de la perseverancia.

De este modo, cada alumno recibirá todo lo necesario para plantar y cuidar un árbol en su casa durante 3 años, momento en el que se lo puede replantar. Para ello, Ecoescuela proporciona una bolsa con semillas de árbol autóctono certificadas, un folleto explicativo sobre el cuidado de las mismas y tierra con un hongo que mejora la germinación. Pasado ese lapso, los escolares y profesores, con el acompañamiento de la empresa, realizarán una excursión a un bosque que haya sido arrasado por el fuego para reforestarlo.

Por lo tanto, los centros escolares y sus docentes están ante una oportunidad histórica no solo de ayudar activamente a la conservación de la Tierra, sino también de darle a sus estudiantes la opción de vivir una experiencia única ante un desafío tan trascendente como el de tener un lugar habitable para su desarrollo y el de las generaciones futuras.